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En noviembre del 2023 realizamos un primer viaje de introspección por la zona de la Costa Atlántica marroquí que va desde Agadir a el Aaiún, pasando por emplazamientos del Anti Atlas como Tafroaute y Jebel Imzi.
El viaje, corto, variado y completo, se dividió en varias fases, os detallamos a continuación la primera de ella que fue la visita a la zona de los últimos drago de Marruecos y del Atlas Continental. Esta extraña y singular especie botánica se encuentra también en las islas Canarias y en la remota isla de Socotra (Mar arábico) donde iremos en octubre del 2024 entre otras cosas, para conocer los mas majestuosos ejemplares del mundo de este árbol tan atípico.
Características del Árbol Drago: Dracaena draco, conocido en castellano como drago o drago de Canarias, es una especie de planta perenne de porte arbóreo de la familia Asparagaceae. Es originario de la Macaronesia y el noroeste de África. Esta planta de lento crecimiento (puede tardar una década en crecer 1 m) se caracteriza por su tallo único, liso en la juventud y que se torna rugoso con la edad. El tallo no presenta anillos de crecimiento, por lo que su edad solamente se puede estimar por el número de hileras de ramas, ya que se va ramificando después de la primera floración, aproximadamente cada 15 años. La planta de apariencia arbórea, está coronada por una densa copa en forma de paraguas con gruesas hojas coriáceas de color entre verde grisáceo y glauco, de 50 a 60 cm de longitud y unos 3 o 4 cm de anchura. Puede alcanzar más de 18 m de altura.
La idea de ir a ver esta rareza botánica vino de parte de dos buenos amigos. Pep Nebot, un botánico de profesión y apasionado como nadie es este “mundillo”, y de Josep María Escofet, un experto en Marruecos que a la vez es una verdadera “caja de sorpresas”. Sus sugerencias, a parte de variopintas, suelen ser peculiares e interesantes.
Los últimos dragos del África continental de localizan en el Jebel Imzi, una pequeña y árida montaña del Anti-Atlas de poco más de 1.500 m de altura. Un lugar remoto, apartado, inhóspito, árido … un trozo de fin de mundo. No es de extrañar que hasta hace relativamente pocos años se descubriese la existencia de estos ejemplares de dragos, puesto que el lugar queda completamente apartado de cualquier circuito turístico.
Poco por debajo de la montaña, a unos doscientos metros por debajo de la cumbre, se localiza el diminuto y tranquilo pueblo de Ajgal Imzi, en cuyo centro podemos observar un bello y esbelto ejemplar de drago que ya es todo un símbolo de la zona. A parte hay pequeños ejemplares, la mayoría de los cuales han sido plantados recientemente gracias al efervescente interés que poco a poco está creando el árbol en la zona, con el consiguiente incremento de visitas. El “turismo botánico” o de amantes de singularidades de la naturaleza, es un verdadero diamante a pulir para los lugareños.
Cuando uno llega a este remoto y abrasador pueblo, donde las temperaturas son altas hasta en noviembre, nunca diríamos que estamos en la montaña de los dragos, ya que, a parte de los pocos ejemplares situados en el pueblo, no se divisa ninguno más. Seguramente antaño deberían ser más comunes en la zona, pero la tala indiscriminada para hacer leña o utilizar la madera, acabó con ellos.
El secreto para localizarlos consiste en subir la cadena del Jebel Imzi e ir a buscar el impresionante barranco que se desprende hacia el E.N.E. Se trata de una agradable excursión donde los jóvenes hermanos Ismael y Hassan nos hicieron de guías. El lugar de observación es realmente espectacular. Los dragos (se han contado casi un millar repartidos por las vertiginosas paredes) quedan todos ellos alejados y colgando sobre riscos de apariencia inaccesible, lo que ratifica que, si se han salvado estos pocos y extraños ejemplares, es porque se localizan muy lejos del posible acceso de leñadores.
A los fondos del barranco, quizás a un millar de metros de desnivel por debajo del lugar de observación, se localiza un diminuto y remoto pueblo cuyo acceso solo puede hacerse a pie. En las paredes frontales y lejanas también se observa otro pueblo, este localizado encima de los riscos, cuyas casas, literalmente, cuelgan del abismo. Estamos ante un escenario poco o nada conocido. El Anti Atlas más primitivo en estado puro.
La cumbre del Jebel Imzi está coronado por una antena a la cual no llega ninguna pista. En si no resulta ser un destino atractivo, por lo que descartamos su ascensión. El interés real de la visita a la zona es el avistamiento de las recortadas aristas, paredes y barrancos donde localizamos los últimos dragos del continente. Más tarde disfrutamos de la humilde y sencilla hospitalidad de la familia de Ajgal Imzi que nos alberga en su casa. Es la familia de la cual forman parte los jóvenes adolescentes que nos han guiado a los puntos de observación.
Es un lugar mágico o de una autenticidad sin paliativos que nos regala momentos de una magia esencial. Compartir la cena y la velada con los locales es una práctica cada vez menos frecuentes, ya que al turista se le trata como el ajeno a servir, donde la distancia por un “buen hacer profesional” es imprescindible. Ningún propietario de restaurante se pondrá a comer en la misma mesa con los comensales. Por suerte esta doctrina básica y elemental aquí no ha llegada. Cenamos todos del mismo cous cous, cada uno con su cuchara. Ni por asomo se les ocurre ofrecernos platos para separar la comida. Según las buenas costumbres bereberes, eso seria una falta de respeto …..
Marcamos al dia siguiente tras un fugaz desayuno en la terraza adornado por las dulces luces del amanecer. El lugar es aún salvaje y por las cercanías del pueblo caminan muflones, gacelas y jabalís. Por la noche una advertencia … no salgáis de la casa … os pueden atacar los perros salvajes.
CARACTERÍSTICAS DE LA EXCURSIÓN PARA LLEGAR AL LUGAR DE AVISTAMIENTO DE LOS DRAGOS:
- Distancia (ida y vuelta): 3 kilómetros 610 metros
- Punto más alto: 1.284 m.
- Punto más bajo: 1.417 m.
- Desniveles: + 246 m. / – 246 m.
- Podéis descargar el track en el siguiente enlace: https://www.wikiloc.com/hiking-trails/ajgal-imzi-drago-tree-153794087
Actividad realiza en noviembre del 2023 junto con Pep Nebot, Juan Vázquez, Moustafá Azdour e Ibrahim Ait Meskouk.
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